Estos dos últimos meses han sido de gran actividad para el fútbol argentino, a pesar del receso por la finalización de la temporada del campeonato. Esta actividad, la selección mayor y la selección Sub-20 fundamentalmente, han dejado mucha tela por cortar.
Se esperaba con gran expectativa la presentación del equipo mayor, con la conducción de Alfio Basile en la copa América disputada en Venezuela. Los partidos previos no lograron un niivel de juego al menos convincente para muchos; se notaron grandes falencias en la faz defensiva, que hacían temer un desempeño irregular. Es cierto que se produjo un gran golpe de efecto al convocar jugadores de gran nivel mediático y que eran pedidos a viva voz (principalmente) por algunos sectores del periodismo vernáculo.
¿Hasta qué punto consideró el Sr. Basile, que jugadores como Verón, Zanetti, Ayala, Abbondanzieri o el propio Riquelme podrían sumar al juego colectivo, o más bien, apuntar directamente al golpe efectista, si no casi demagógico? No voy a explayarme demasiado sobre los antecedentes de cada uno de estos jugadores, pero son varios de ellos (los indiscutibles de otras etapas del seleccionado) rezabios del equipo de Passarella del preolímpico de 1994. ¿Hasta qué punto estos jugadores pudieron en el trazado mental del Coco contribuir para formar un equipo competitivo?
Ya con la competición en marcha, con el equipo demostrando amplias posibilidades en la ofensiva, pero algunos notorios desacoples en lo defensivo (en algunos pasajes de los partidos pareciese que no gritan), aún así se ganó, y con las sucesivas victorias volvieron los cantos de sirena de otrora...
¿Recuerda Ud. en el paso anterior de Basile, los grandes y elogiosos comentarios en aquellos tiempos del invicto de 33 partidos? Semanas atrás volví a escucharlos: "el equipo de la gente", "la selección de todos", etc. Se lograron momentos de muy buen fútbol, que no es poco, se ganaron partidos, tampoco un elemento menor. Pero se notó un preocupante triunfalismo en las crónicas deportivas. Y volvimos a caer en lo mismo... Volvió como por arte de magia el recuerdo de las gorritas de EEUU 1994, el de algunos jugadores, la soberbia hasta límites extremos (se descontaba ganada la Copa). Y el duro golpe de realidad. Pero son consecuencias, siempre se puede perder, todos los grandes equipos de la historia han perdido. Y como un dèja vú volvieron las críticas despiadadas de los mismos desaforados que dos días antes celebraban por anticipado. Y se marcaron los errores, se magnificaron algunos y se minimizaron otros (siempre hay sospechosos privilegiados).
No soy de los anti-Riquelmes que pululan desde el año pasado, pero realmente intento ser lo más objetivo posible y ver el partido como un todo y no como un rejunte de individualidades, y la verdad, muchas (demasiadas más de las que me gustaría) no me convence la cadencia monótona de su juego. Comentario este que me valdrá algunas antipatías, pero me sorprende como la figura de quien ha sido de alguna manera erigido por voluntad popular del mundillo futbolístico, en conductor del juego del equipo mayor, desaparecer directamente de los partidos. ¿Por qué deben sumarse jugadores voluntariosos a colaborar con su juego? ¿Por qué se debe esperar a fuerza de pelotazos o de pases intrascendentes que este muchacho saque de la galera una pase gol? Debemos esperar que se se encuentre rodeado de Tévez o Aimar para que el se ponga el marcha el andamiaje ofensivo de la selección. ¿Cuántas veces se lo pudo observar a Messi cambiando de posición en búsqueda de una pelota limpia? Sin embargo, la prensa especializada se obstina en elevarlo al nivel de jugador desequilibrante y protagonista de los partidos.
¿Verón? Bien, gracias. Muy divertido echando yerba en la calva de Felman, pero apático como en la tierra del sol naciente. Debería comprender que existen variantes a su conocidísmo y registrado pelotazo frontal (muy útil en tiempos de Bielsa, por aquello de tirar adelante y presionar) irrelevante en el planteo actual.
¿Abbondanzieri? Otro gran colaborador de programas de cable, por momentos demasiado inseguro, por momentos correcto. ¿Llega a Sudáfrica? Lo dudo. Me gustaría pensar que es un guiño del Coco para despedirlo con gloria de su paso por la selección. De otra manera sería mejor darle rodaje a algún valor nuevo para ocupar un puesto bastante descuidado en los últimos ciclos del equipo de AFA.
Messi, mostró sus mentadas cualidades con creces, es un excelente jugador, con gran futuro, sería muy bueno que algunos de sus compañeros experimentados transmitieran algunas vivencias para marcarle algunas decisiones erradas. El tiempo dará su inexorable veredicto.
Tévez, voluntarioso, sacrificado, mira el campo cuando pisa el área, podría hacer goles también.
Mascherano, muy sólido en la tarea defensiva, cubrió muchos baches en ese ítem. Espero que mantenga el nivel.
Simplemente espero que se haya aprendido de la lección de esta Copa América, se lograron interesantes momentos de fútbol, es lo rescatable, no fue un desastre como lo quisieron pintar los exitistas de siempre, si antes de la final querían canonizar a Basile, y después de Brasil poco más y pedían la vuelta del pelo corto y la rinoscopía...
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